El primer tostador de café del Norte fue fundado en Helsinki a principios del s. XX, aunque a mediados de la década de 1920 la mayoría del café que se vendía en el país era aún café fresco sin tostar. En 1931, la empresa Paulig lanzó al mercado el café molido Juhla-mokka, que se convertiría en el más popular de Finlandia. En la actualidad, los finlandeses beben una media de 4 ó 5 tazas al día y un paquete de café es un regalo tradicional. A los invitados siempre se les sirve café, incluso por la noche, después de la sauna.


El primer tostador de café del Norte fue fundado en Helsinki a principios del s. XX, aunque a mediados de la década de 1920 la mayoría del café que se vendía en el país era aún café fresco sin tostar. En 1931, la empresa Paulig lanzó al mercado el café molido Juhla-mokka, que se convertiría en el más popular de Finlandia. En la actualidad, los finlandeses beben una media de 4 ó 5 tazas al día y un paquete de café es un regalo tradicional. A los invitados siempre se les sirve café, incluso por la noche, después de la sauna.